Lo mejor será buscar equilibrio desde el Congreso con fiscalización y control político

marcial delacruzMARCIAL DE LA CRUZ ESPARZA
@marproducer 

Periodista, Comunicador, Productor y Conductor en medios e instituciones públicas y privadas, desarrollado como DirCom, con estudios en la UPSMP y complementarios U. de Lima.

Lo mejor será buscar equilibrio desde el Congreso con fiscalización y control político No hay guerra, pero parece. Volvemos a partir la mesa, con la posibilidad de decirle chau al Congreso y al país que tratamos de reconstruir. El Presidente dice una cosa y se hacen otras, propone trabajar todos los peruanos por el Perú, pero sus ministros, congresistas y acciones, son una provocación a la discordia. La agenda de Pedro Castillo ya no es la que quiere la ciudadanía que empieza a expresar descontento. Es prematuro decir que ha decepcionado; sin embargo, pierde estabilidad y se viene una ola de protestas que se pueden evitar corrigiendo con rapidez los errores políticos.

Todos los días hay algo que comentar con sorpresa de los actos del gobierno. Lo más crítico es que un 70% (según una encuesta) quieren que Guido Bellido deje el gabinete ministerial por sus extraños vínculos con grupos que son investigados en el VRAEM, además de falta de capacidad para gobernar. Al respecto no hay un pronunciamiento ni vergüenza por el papelón.

Los mensajes contradictorios parecen que son parte de un plan o de la improvisación por falta de cuadros e ideas. En ambos casos es regresar al conflicto social que se convierte en algo permanente y perturbador para la vida social y económica. Las banderas de la queja se agitan y los tambores previos a la batalla empiezan a sentirse.

El precio del dólar ha tenido un alza histórica (en tres días el sol perdió 6%) y superó los 4 soles, algunos alimentos siguen en alza y la disputa internacional por el petróleo se suma para agravar la situación. La credibilidad del gobierno disminuye cuando todo estaba listo para que se opere el cambio.

El presidente, más allá de los discursos oficiales, no dice nada y ha iniciado un silencio complice del problema, ademas de incumplir la ley de transparencia. Mientras tanto él Presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido, acusa a la prensa de ser obstruccionista y le ha cerrado el paso a los periodistas que cubren “Palacio de Gobierno”. Más que una torpeza es otro error político.

Perú Libre, Vladimir Cerrón y sus simpatizantes culpan a la oposición de todo lo que pasa y piden los dejen gobernar desde el partido Perú Libre y que no inventen enfrentamientos o pugnas por el poder con Pedro Castillo, quien al final resulta ser el único culpable de la crisis.

Esta semana la bomba fue Guillermo Bermejo, que dijo: “que si no les gusta el Gabinete Bellido, le denegarán la confianza, presentarán otro, y si vuelven a denegar la confianza, chau, Congreso”. El congresista es un personaje especial que evidencia cierta falta de información y poca formación política.

Mejor será buscar equilibrio desde el congreso con fiscalización y control político. Borrar las palabras “cerrar” y “vacancia”, el Parlamento tiene que mostrar madurez y dejar la primariosa democracia para organizar un grupo que presente fundamentos que puedan rebatir lo que consideren está fuera de los cambios que hoy en día requiere el país.